Cinco personas (incluyendo los expertos) que se aventuraron en una experiencia única en el Océano Atlántico para conocer los restos del Titanic han generado alertas por varias compañías y las autoridades desde el pasado domingo por la mañana, esto tras no tener ningún rastro del paradero del submarino en el que viajaban, según informó el diario británico The Guardian.

Por su parte, un portavoz de la Guardia Costera de Boston (Massachusetts, Estados Unidos), informó al mundo que “un pequeño submarino con cinco (5) personas a bordo ha desaparecido en las cercanías del lugar del naufragio del Titanic“.

La compañía responsable de estas vidas humanas y la nave es OceanGate Expeditions, la cual organiza las expediciones a un costo de 250,000 dólares por un itinerario de varios días a unos 3,800 metros de profundidad y a una distancia de aproximadamente 640 kilómetros de la isla canadiense de Terranova.

El grupo en cuestión anunció recientemente en su portal digital que una expedición para ir a ver los restos del Titanic “estaba en marcha”. El pasado 14 de junio, dijeron por medio de Twitter que estaba usando la empresa de comunicaciones Starlink para mantener abierta la línea de comunicación con esta expedición.

El panorama es muy complejo. Las condiciones son muy precarias y el oxígeno se termina para estas personas. Se espera que las autoridades puedan dar cuanto antes con el paradero de esta nave y los viajantes puedan contar esta terrible experiencia.