Ana Karina Ramos Corniel, de 27 años, ha demostrado una fortaleza extraordinaria tras sobrevivir a una agresión extremadamente grave que casi le cuesta la vida. Con heridas de arma blanca y un disparo de perdigones que le causaron lesiones severas, incluyendo más de “2,000 gusanos” en su cuerpo, su condición era crítica. Sin embargo, Ana Karina ha estado luchando valientemente por su vida y, aunque su situación sigue siendo delicada, se mantiene estable dentro de sus condiciones de cuidado en el Hospital Doctor Vinicio Calventi.
El director del hospital, José Alfaro, ha indicado que Ana Karina presenta una lesión en el tórax posterior y que se sigue evaluando su recuperación, la cual esperan sea satisfactoria. Ana Karina fue encontrada en un terreno baldío en el kilómetro 32 de la autopista Duarte, en el municipio de Pedro Brand, provincia Santo Domingo, después de haber estado desaparecida durante tres días.
Madre de dos niñas pequeñas, de 4 y 2 años, Ana Karina ha sido descrita por su hermana, María Paulino, como un “milagro de Dios” y una “guerrera” por su capacidad de resistir y luchar en circunstancias tan adversas.
Los hechos que llevaron a esta situación son aún más perturbadores. Según la hermana de la víctima, Ana Karina fue contactada por el agresor, Eduardo Antonio Guerra García, para limpiar su casa. Después de completar el trabajo, cuando Ana Karina rechazó los avances indebidos del agresor, fue atacada y herida gravemente. Guerra García, quien trabajaba como vigilante privado, ha sido detenido por la Policía Nacional, que informó que utilizó un arma cortante y una escopeta calibre 12 para cometer la agresión.
Este caso ha conmocionado a la comunidad y ha puesto de relieve la necesidad de justicia y apoyo para Ana Karina y sus hijas en estos momentos críticos.
