El periodista Ramón Tolentino volvió a abordar el caso de Paula Santana este lunes, instando a Miriam German, máxima autoridad judicial del país, a tomar medidas sobre un caso que, según él, fue cerrado con mentiras y falsedades en las investigaciones. Tolentino afirmó que Santana fue abusada dentro de la nave de la empresa y luego lanzada al mar, con la intención de que las corrientes se llevaran su cuerpo.

Reveló que a los familiares les asignaron una psicóloga por parte de las autoridades, pero solo asistió un día para hacer “aparataje” frente al Ministerio de la Mujer, afirmando que fue por una formalidad y para “justificar” un pago.

Lo más impactante fue cuando Tolentino reveló un chat exclusivo de empleados que contenía pruebas y testigos que no fueron incluidos en la investigación. Además, señaló que hay evidencia de cámaras en las instalaciones que apuntaban directamente al lugar donde ocurrieron los hechos, y que el Ministerio Público posee grabaciones, pero no las ha confirmado a los medios, sugiriendo que hay secretos ocultos en el caso.

También mencionó que el teléfono de Santana sigue funcional pero no se ha utilizado como prueba, y que la cédula de identidad de la supervisora implicada es falsa, al igual que la de los detenidos que utilizan identidades falsas en la documentación legal relacionada con el caso.

Estas nuevas revelaciones plantean serias interrogantes sobre la integridad de la investigación inicial y la necesidad de una revisión exhaustiva del caso.