Salcedo, RD. – Entre lágrimas, Ana Ovalles, madre de Carlos Jesús Blanco Ovalles, un niño de 12 años que resultó con quemaduras de tercer grado durante el incendio en el carnaval de Salcedo, describe cómo se sintió al verlo en el hospital: “Solo pude orar por él, le pedí a Dios que me lo devolviera, aunque sea quemado”.

Era la primera vez que Carlos Jesús participaba en el carnaval. “Él estaba muy entusiasmado con los enmascarados”, relata su madre. Ahora, el menor se encuentra en estado delicado en la Unidad de Quemados Doctora Thelma Rosario del Hospital Infantil Regional Universitario Arturo Grullón, en Santiago.

Ana Hernández, tía de Esteban Hernández, otro menor de 14 años que también está gravemente herido, expresa la devastación que siente la familia: “Aquí estamos todos así, el niño está muy delicado de salud“. Esteban iba a ser sometido a una amputación de manos, pero una intervención quirúrgica logró evitarlo. Su pronóstico sigue siendo reservado.

Rosa Blanco, abuela de César Polonia, otro menor que resultó quemado, asegura que nunca había pasado nada similar en las celebraciones del carnaval: “Toda la vida aquí se disfrazan, se hacen sus caretas desde muy temprano“. César, asmático de 14 años, se encuentra entubado y con un estado de salud delicado en el hospital Robert Reid Cabral, en Santo Domingo.

El incidente del domingo dejó al menos 19 personas afectadas, 12 de ellas en estado crítico, entubadas y con quemaduras de tercer grado. De los pacientes, ocho son menores de edad y cuatro son adultos.

Las investigaciones sobre las causas del incendio aún están en curso. Según las versiones preliminares, los fuegos artificiales se encontraban debajo de la tarima en la cueva de uno de los grupos y, por un motivo aún no esclarecido, se incendiaron, provocando la tragedia.

Las autoridades se encuentran trabajando para determinar las responsabilidades y evitar que hechos tan lamentables como este se repitan en el futuro.