Junior Villilo Ventura

En medio del incremento de casos de dengue en el país debido a las lluvias dejadas por la tormenta Franklin y los criaderos del mosquito transmisor de la enfermedad, se conoció este sábado que falleció un menor de 16 años, quien se encontró ingresado recibiendo atenciones especiales en el Hospital Pediátrico Robert Reid Cabral, por cuadro de dengue hemorrágico, según confirmó su madre.

El dengue es una enfermedad que tiene mayor incidencia entre los 6 y 16 años de edad y dentro de la clasificación de la gravedad de la enfermedad, se conoce el dengue con signos de alarma, sin signos de alarma y el choque por dengue, siendo la afectación de este último más grave.

Heridania Ventura dijo que su hijo Junior Vitillo Ventura fue tratado como un caso de dengue desde que llegó al centro de salud el pasado 21 de agosto, presentando fiebre y dolor de cabeza, padeciendo unos durante 13 días de fiebre, vómitos y dolor abdominal.

Entre llantos y tristeza, la señora narró que su hijo, quien cantaba y alababa a Dios, empeoró ayer sábado, cuando comenzó a vomitar sangre, hasta que finalmente falleció la noche del mismo día.

“Mi hijo era un niño ejemplar, estudiante meritorio, pasó a sexto este su último año en el Colegio Ángeles Custodios de Cristo Rey, esto es un dolor tremendo”, explica la madre entre lágrimas.

Asimismo, agregó que “nosotros vivimos en el barrio Los Ramírez de Arroyo Hondo Segundo, y usted puede ir a preguntar ahí por ese muchacho con solo 16 años y era un ejemplo a seguir”.

De acuerdo con el progenitor de Junior Vitillo, el señor Mario, no puede quejarse del trato recibido en el hospital citado. “No me puedo quejar, desde el conserje hasta las doctoras, a mi hijo lo trataron como un rey”, aseguró al narrar que en los días en los que estuvo ingresado su hijo en cuidados intensivos, se necesitaba de una máquina especial para su tratamiento de la que carecía el centro médico, pero supuestamente la Presidencia de la República envió una carta y respondió inmediatamente.

Conmovido, el padre no pudo evitar las lágrimas mientras recordaba momentos inolvidables junto a su hijo Junior. “Era el mejor hijo que Dios me pudo haber dado. Yo me quedaba con él en las mañanas, me lo llevaba para el trabajo, yo no sé mucho de letras, pero él me decía papi, venga, esto se hace así”, al tanto que lo consolaba su hermano mayor, quien reconoció que Junior era el mejor hombre aunque era un niño.

El cuerpo del menor fue entregado por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) este domingo a sus familiares, quienes realizaron sus exequias fúnebres para luego ser llevados al camposanto de Arroyo Hondo, donde residen para su sepultura cristiana.

Cabe destacar el posible error del periódico (fue ingresado el pasado 21 de agosto).