Santo Domingo, RD – Cuatro personas enfrentan cargos por presuntamente liderar una red de trata de personas con fines de explotación s3xu4l en República Dominicana, tras engañar a mujeres colombianas con ofertas laborales ficticias. Los acusados, identificados como Dariel Castro Santos, Jason Manuel Santana (“Nino”), Félix Joel Rodríguez (“Yoi”) y Geraldyne Torres Betancur, fueron señalados por el Ministerio Público y la Policía Nacional como responsables de reclutar, retener y explotar a sus víctimas.
La Procuraduría Especializada Contra el Tr4f¡c0 de Migrantes y Tr4t4 de Personas (PETT) solicitó prisión preventiva contra los imputados en el marco de la “Operación Venus”, que ha identificado a siete mujeres colombianas como víctimas, cuyos nombres se mantienen en reserva. Según el expediente, las mujeres eran atraídas con promesas de empleo, pero al llegar al país eran confinadas en apartamentos en Manoguayabo, Santo Domingo Oeste, y obligadas a prestar servicios sexuales en discotecas y hoteles por RD$7,000, sin recibir el dinero, que era controlado por los acusados a través de cuentas bancarias.
Dariel Castro Santos, dominicano y supuesto líder, manejaba la logística y los recursos.
Jason Manuel Santana (“Nino”) transportaba y vigilaba a las víctimas, en cuyo vehículo se encontraron sustancias.
Félix Joel Rodríguez (“Yoi”) supervisaba y presionaba a las mujeres, suministrándoles sustancias.
Geraldyne Torres Betancur, colombiana y pareja de Castro, reclutaba desde Colombia con falsas promesas. Las víctimas eran sometidas a una deuda ficticia de USD$3,500, enfrentaban amenazas contra sus familias, retención de pasaportes y restricciones de alimentos.
El desmantelamiento de la red se logró gracias a una fuente confiable, revelando el uso de engaño y coacción contra mujeres vulnerables. El juez Reyes Rodríguez, de la Oficina de Atención Permanente de Santo Domingo Oeste, aplazó la audiencia de medida de coerción para el viernes 28 de febrero, mientras las autoridades continúan profundizando en el caso que ha generado indignación por la gravedad de los hechos.