La muerte de la influencer Denisse Reyes ha conmocionado a sus seguidores y ha generado un debate sobre la seguridad en las cirugías estéticas. La joven de 27 años falleció el pasado 29 de enero tras sufrir complicaciones luego de una liposucción realizada en una clínica de Chiapas, México.
Según informes, la clínica Médica San Pablo, donde se realizó el procedimiento, no contaba con la autorización necesaria para llevar a cabo este tipo de cirugías. Además, se ha denunciado que el médico que atendió a Denisse Reyes no contaba con la experiencia necesaria.
La familia de Denisse Reyes ha expresado su dolor y ha exigido justicia, mientras que las autoridades investigan lo ocurrido. Este trágico suceso ha puesto de manifiesto la necesidad de regular con mayor rigor el sector de la cirugía estética y de garantizar la seguridad de los pacientes.