La comunidad de Esperanza está en estado de shock tras la muerte de María Sánchez, una joven de 30 años, quien fue víctima de un violento ataque el pasado 26 de enero.
Según relatos de sus familiares, María caminaba cerca de un puesto de venta en la calle Cristal cuando, tras una discusión, un grupo de vendedores ambulantes, conocidos como “los que venden hot dogs”, la agredió. La atacaron brutalmente, golpeándola y arrojándole aceite caliente.
A pesar de ser trasladada urgentemente a un centro médico, las lesiones que sufrió fueron tan graves que, lamentablemente, no pudo sobrevivir. Su familia, llena de indignación y dolor, clama por justicia y pide a las autoridades que se investigue el caso y se castigue a los responsables del ataque.
“María no merecía esto. La golpearon hasta matarla. Lo único que queremos es justicia”, expresó un familiar visiblemente afectado.
La comunidad de Esperanza se une en su demanda de respuestas y acciones firmes para garantizar que casos como este no queden impunes.